Por: Javier Hernández El Abuelo.
Twitter: @abuelo_11
Puede pasarnos todo, puede no pasar nada,
No es más que otra tocada más.
Alejandro Lora.
El día esperado llego y pudimos disfrutar de una de las celebraciones musicales más importantes de Latinoamérica, el “El Festival Iberoamericano de Música” mejor conocido como “Vive Latino” nos trajo una nueva edición y con ella muchas, anécdotas, sorpresas, lagrimas, decepciones, enojos, frustraciones, alegrías y un sinfín de historias que se seguirán contando a lo largo de los próximos meses, ya que cada vez demuestra por qué siempre levanta tantas pasiones y genera tanto amor/odio y desde que se presenta el cartel hasta el día de su realización genera mucha polémica, es una realidad que ha caído en excesos por los cuales ha pagado factura, pero la verdad es que ya forma parte de la cultura popular no solo de nuestro país, ya que durante su realización mucha prensa internacional viene a cubrir el evento, por el gran número de artistas internacionales que se presentan en esta celebración.
A mí me toco ir el tercer día ya mis compañeros escribirán lo de los días anteriores, en general mucho entusiasmo pero ya había gente que se veía cansada, día muy nublado con amenaza de lluvia pero afortunadamente no llovió y me parece que viernes y sábado estuvo igual. La misma situación de siempre, quieres partirte en 3 o 4 para estar en varios escenarios pero es imposible y tienes que sacrificar siempre algunas cosas, cartel muy equilibrado, siempre hay algo que ver y descubrir, la carpa intolerante demostró que cada vez más gente se acerca a buscar alternativas diferentes y en esta edición le fue bastante bien, también se demostró que no siempre el escenario principal capta la mayoría de las miradas y en general estuvieron muy parejos todos.
Musicalmente ofrece un sinfín de géneros musicales, es por eso que los puristas no concuerdan muchas veces con la incursión de algunos estilos musicales que hace algunos años parecían inimaginables en este festival, pero con tanta opción a la mano y como nadie te obliga a estar en alguno de los escenarios y por el precio del boleto de un día puedes disfrutar de 5 o 6 conciertos completos, la realidad es que vale mucho la pena.
Die Antwoord, Dave Matthews Band y Mon Laferte los grandes ganadores del día, fueron de los más aplaudidos, destacando también; El mato a un policía motorizado, La Milixia, Los Elásticos, Hawaiian Gremlins, Agárrate Catalina, Los Victorios, Garbage y Jorge Drextler. Molotov dejo mucho que desear, de entrada tardaron más de veinte minutos para salir y se veían cansados y un poco hartos, ojala que haya sido solo un mal concierto ya que muchos de sus fans si esperaban más de sus ídolos.
Lo importante es que muchas bandas que tenían que aprovechar sus 25 o 30 minutos de fama al parecer si lo hicieron y ojala que las bandas noveles entiendan que es solo un concierto más, que hay que trabajar mucho, este festival te puede catapultar a la fama pero ojo también puede ser lo que termine con su banda y hemos visto algunos casos, en general esta fiesta cumplió como siempre cumple y esperemos que el próximo año nos vuelva a regalar estas vivencias que nos dejan tatuajes en el alma y en la mente que siempre llevaremos con nosotros.
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